Época: Barroco10
Inicio: Año 1600
Fin: Año 1700

Antecedente:
La pintura holandesa

(C) Antonio Martínez Ripoll



Comentario

A la pintura de paisajes puros, soñadora e imprecisa, se opuso en Holanda otra de vistas de los edificios, concreta y precisa. Entre los pintores de arquitectura, los hubo que dejaron una gran impronta sobre el arte de la construcción y la ciencia de la perspectiva, otros sobre la suntuosidad decorativa y la elegancia mobiliar de los interiores. Los propugnadores de la perspectiva científica se consideraban, desde el siglo XVI, eruditos y, por consiguiente, como artistas de rango superior. En las vistas de edificios se impuso Pieter Jansz Saenredam (Assendelft, 1597-Haarlem, 1665), que llegó a ofrecer sus servicios de dibujante al arquitecto y pintor J. Van Campen, sobre todo con sus interiores de iglesias vacías de público y sin mobiliario, de blancos muros encalados, que potencian la visión en profundidad de los planos espaciales y la geometría de las masas y los volúmenes, y declaran la esencialidad definidora de la luz. Su sólido y preciso trabajo, que se puede reconstruir enteramente (siguiendo sus dibujos preparatorios), lleva la marca de la catarsis purificadora del arquitecto-diseñador. Sus pinturas son, en realidad, dibujos reportados a las tablas y, de inmediato, realzados con tintas ligeras. Esta operación entraña tanto la traslación de los detalles arquitectónicos como de la atmósfera que todavía reina entre los muros de los espacios vacíos de las iglesias góticas reestrenadas por los protestantes. Ante la obra de Saenredam, se olvida lo sorprendente que resulta un pintor de arquitecturas que no imagina las construcciones sino que se ciñe al replanteo figurativo de las edificaciones existentes (El antiguo Ayuntamiento de Amsterdam, Amsterdam, Rijksmuseum).Fue en Delft donde Emmanuel de Witte (Alkmaar, h. 1618-Amsterdam, 1692) aprendió a aplicar a los interiores de iglesias realistas de Saenredam los principios de la perspectiva diagonal declarada por los franceses. Con todo, sus interiores de iglesias fueron menos exactos que los de Saenredam (Nieuwe Kerk de Amsterdam, 1656, Amsterdam, Rijksmuseum), porque solía ensamblar entre sí partes de diferentes iglesias góticas o bien las combinaba con elementos de fantasía. Su luz se hace más íntima, más dulce, y los personajes vestidos a la moda del tiempo introducen algunos toques de color en los grandes espacios blancos de las iglesias.Si durante la primera mitad de la centuria, únicamente hubo unos pocos paisajes urbanos de Saenredam, a los que podríamos añadir el par de vistas de Vermeer del sexto decenio, a lo largo de la segunda mitad del siglo Job Berckheyde (Haarlem, 1630-1693), además de los típicos interiores de iglesias, se entregó a la pintura de panorámicas urbanas (Oudegracht de Haarlem, 1666, La Haya, Mauritshuis), en las que inició a su hermano Gerrit (1638-1698), cuyas vistas topográficas, demasiado exactas y precisas, pueden soportarse por la armonía de sus grises y malvas y sus intentos vermeerianos de interpretación atmosférica (El mercado y la Groote Kerke de Haarlem, 1671, Haarlem, F. Hals Museum).